Nadie está exento de atravesar una situación inesperada que afecte el patrimonio o el bienestar propio y de toda la familia. Eventos como accidentes de auto, la muerte propia o de algún familiar, enfermedades, desastres naturales, o incendios son riesgos a los que nos vemos expuestos y que pueden materializarse de un momento a otro y afectar nuestra tranquilidad y nuestro bolsillo, si no estamos debidamente preparados.

Estar asegurado es por ende muy importante, ya que de esta manera podemos proteger nuestro bienestar y nuestro patrimonio, al saber que contamos con un respaldo económico en caso de atravesar por una situación inesperada. De esta forma, garantizamos que todo lo que hemos obtenido con esfuerzo a lo largo de años de ahorro y trabajo no se vea comprometido.